El Juego Macabro del Poder

Esteban Josué Beltrán Ulate

Es inconcebible el juego macabro en el que se ven envueltos los pueblos dominados por un mítico alado imperialista, mediante maniobras de manipulación y miedos infundidos, surgirán falsos profetas y algunos al servicio de un sacrificio ilusorio, en pos de la confusión de consciencias sedientas que tendrán próximamente la posibilidad de hundir a su pueblo con la macha de tinta en sus dedos y una urna contenedora de inexistentes promesas. En los grandes palacios parece que se teje una misteriosa operación que muchos no comprenden ni comprenderán, el juego dialectico de poder entorno a la obtención de capital, es un aberrante motor que anima a muchos a deshumanizarse y deshumanizar.

Una mano cubre las venas abiertas de América latina que continúan sangrando, es la misma mano que no brinda la garrafa de agua a los pueblos africanos, es la mano que no desea secar el sudor de los explotados, de aquellos que tienen que subsistir en una existencia que por ley natural deben vivir; esta mano repugnante que abofetea a la humanidad misma, es la mano de los sistemas económicos imperantes que trivializan la visión antropológica, y encasillan a la persona humana en simple mano de obra o en “Ser consumidor”.

En el seno de cada pueblo deben surgir voces de alerta, mismas que promuevan procesos de reflexión-acción, sin banderas, sin lemas, sin imágenes, simplemente con el ideal de un ser humano íntegro, capaz de ser autónomo, con vocación al compromiso. Los tiempos del ahora se tornan escabrosos, los gobernantes lucen enfermos en su propia falsa de gobierno, los pobres dormidos (inconscientes) permanecen en vela rezando en sus frágiles techos, mientras emisarios (también inconscientes) ejecutan ordenes de un macabro movimiento económico que denigra a la persona.

Nuevas generaciones estarán pronto a abordar el tren de la humanidad, esta pues en cada uno de los pocos conscientes, esos extraños seres en estado de extinción, despertar la conciencia, de sus más cercanos, provocando un efecto en cadena, generador de cambio, un proceso en base a reflexión-acción, un proceso demopedico (educación de la persona). Caerán los falsos profetas, superficiales gobernantes, maniquíes manipulados por ansias de poder económico, y surgirá el nuevo Hombre, que no es más que el Hombre mismo, uno que se reconoce en el rostro de su semejante, uno que se encuentra en su vocación de compromiso con sus colegas humanos y con su entorno.

Beltrán, E. (2009). El Juego Macabro del Poder.

Diario Digital El País (www.elpais.cr). Miercoles 12 de agosto, 2009